López Cabanas: "La sociedad tiene una idea muy equivocada de lo que es la intervención social"

El pasado 17 de marzo el Colegio de Psicología de Navarra celebró su tradicional homenaje a los profesionales de la psicología que cumplieron 25 años de colegiación, además de dar la bienvenida a los nuevos colegiados durante 2022. En el acto contamos con la presencia del psicólogo Miguel López Cabanas, vocal de la Junta Directiva de la División de Psicología de la Intervención Social del Consejo General de la Piscología y vicepresidente de SEPIS (Sociedad Española de la Psicología de la Intervención Social), quien pronunció la conferencia “Psicología de la Intervención Social. Construcción del concepto y principales retos”.

¿Qué es la psicología de la intervención social?

La definición que propusimos tres profesionales en un estudio realizado para el Colegio Oficial de la Psicología de Madrid en 2017, y que es comúnmente aceptada, es la siguiente:

“La Psicología de la Intervención Social es un conjunto de saberes y prácticas fundamentadas en la ciencia del comportamiento humano que se aplican a las interacciones entre personas, grupos, organizaciones, comunidades, poblaciones específicas o la sociedad en general, con la finalidad de conseguir su empoderamiento, la mejora de su calidad de vida, una sociedad inclusiva, la reducción de las desigualdades y el cambio social. Todo esto mediante estrategias proactivas y preventivas que dinamizan y favorecen la participación de personas y comunidades y tienen en cuenta la diversidad humana” (López-Cabanas, M. Cembranos-Díaz, F. y Casellas-López, L. ,2017)

¿Qué problemas fundamentales cubre el especialista en esta materia?
Como puede derivarse de la definición propuesta, la Psicología de la Intervención Social no solo se dedica a solucionar problemas; bien al contrario, se dedica también a desarrollar estrategias y acciones proactivas y preventivas que mejoren la calidad de vida y el bienestar psicológico de las personas, familias, grupos y comunidades, evitando, o amortiguando el impacto, de situaciones que podrían llegar a ser catalogados como “problemas”. Cuando éstos surgen, desde los conocimientos propios de la disciplina psicológica, se realiza una atención holística, centrada en los contextos y en las interacciones (o en su ausencia) de las personas, familias, grupos, perfiles poblacionales o comunidades.

¿Con qué tipo de personas interviene el psicólogo especialista en la intervención social?
Las y los especialistas en Psicología de Intervención Social podemos intervenir con todo tipo de personas, a lo largo de su desarrollo y en todos los ciclos vitales, desde la infancia hasta la vejez. Dependerá, en todo caso, de la organización dónde se ubique cada profesional.

Las entidades públicas (gobiernos, ayuntamientos etc.) ¿son conscientes de la importancia del psicólogo de intervención social?
Hay variaciones por Comunidades Autónomas y por tipos de estructuras organizativas, pero la respuesta general sería no, o no de manera suficiente, lamentablemente. Ello repercute de manera negativa en la calidad de los servicios que se ofrecen a la población y en sus costes: actuaciones preventivas y proactivas, diseñadas y ejecutadas desde la ciencia del comportamiento humano, está demostrado que ahorran muchos costes de posteriores intervenciones dirigidas a paliar problemas cuyo surgimiento podía haberse evitado o disminuido su gravedad. Las personas responsables en las administraciones públicas deberían ser conscientes de ello.

¿Qué diferencia al psicólogo de intervención social de otras profesiones muy relacionadas, como podría ser los profesionales de Trabajo Social?

La Psicología es una disciplina científica, además de una profesión aplicada. Es la ciencia del comportamiento humano y la profesión que trabaja, desde sus saberes científicos, para que dichos comportamientos (individuales, en familia, en organizaciones, en grupos, en su comunidad) sean generadores de bienestar, propio y de las personas de los entornos en los que se interacciona. También existen profesiones que basan su praxis en la aplicación de los conocimientos de diversas disciplinas, lo que no las hace menos relevantes. Pensemos, por ejemplo, en la Medicina, profesión que, como se sabe, aplica los conocimientos de varias disciplinas científicas. Pero, como disciplina científica y como profesión aplicada, la Psicología tiene conocimientos propios, de primera mano, permitiendo evaluar con rigor a individuos, familias, grupos y comunidades, determinando qué aspectos de los comportamientos explorados habría que mantener o modificar y, en su caso, en qué sentido, diseñando y ejecutando y/o supervisando las acciones concretas que se hayan derivado de la evaluación realizada. Y digo “ejecutando y/o supervisando”, porque tras la evaluación de las situaciones, habrá algunas actuaciones que deban realizarse exclusivamente por profesionales de la Psicología de Intervención Social y otras por otros perfiles profesionales, con otras competencias (profesorado de centros docentes, profesionales del Trabajo Social, etc.) , lo que, en aras a intervenciones integrales e interdisciplinares, debe implicar por un lado una coordinación y, por otro, una supervisión para que el abordaje de estas situaciones se ajuste al máximo a la evaluación  psicológica realizada.

¿Considera que la sociedad percibe con claridad las diferencias entre los diferentes profesionales vinculados a la intervención social?

Mi opinión es que la sociedad tiene una idea muy equivocada de lo que es, o debería de ser la Intervención Social, con su enorme potencial para generar una sociedad más inclusiva e igualitaria, que redunde en una mayor calidad de vida de toda la población, con acciones generales o transversales, así como otras específicas para perfiles poblaciones, comunidades o contextos específicos. Es decir, la percepción de la población creo que se centra en considerar que la Intervención Social solo está para solucionar problemas, y, además, graves. Con esta realidad, lo más probable es que los y las profesionales que más se conozcan sean los que más se han venido dedicando a actuaciones asistenciales o paliativas, llegando a identificarse al conjunto de la Intervención Social con solo ese tipo de actuaciones. Partiendo de esta situación, y respondiendo a la pregunta, creo que la población, en general, no conoce suficientemente los distintos perfiles profesionales de la intervención social lo que dificulta, de manera obvia, su diferenciación.