Curso sobre la formación en la evaluación de personas con discapacidad intelectual
Curso sobre la formación en la evaluación de personas con discapacidad intelectual
Susanna Esteba-Castillo, neuropsicóloga del SESM-DI (Servicio Especializado en Salud Mentaly Discapacidad Intelectual) del Parc Hospitalari Martí i Julià de Girona, impartió recientemente en Pamplona a un grupo de psicólogos el curso "¿Estamos formados para la evaluación de personas con discapacidad intelectual? Aportación de la neuropsicología y su relación con los fenotipos conductuales" que organizó el Grupo de Discapacidad intelectual y/o Trastornos del desarrollo del Colegio de Psicología de Navarra. El fin del curso fue "que los profesionales que trabajan con personas con discapacidad intelectual y alteraciones de conducta o problemas de salud mental entiendan el trabajo desde una perspectiva multimodal", explicó Esteba-Castillo.
Sobre las carencias que en esta materia tienen los psicólogos, Esteba-Castillo consideró que "los psicólogos han recibido mucha formación sobre el análisis funcional y el apoyo conductual positivo. Pero para poder hacer buenos planes de intervención basado en el soporte conductual positivo, no sólo se debe tener en cuenta la conducta funcional. Es importantísimo estudiar otras posibles razones que causen malestar en la persona, así como conocer la presentación conductual de las distintas crisis epilépticas o la de prestar atención al fenotipo, o conocer las manifestaciones conductuales de la enfermedad mental. De la misma manera vale la pena realizar un estudio cognitivo que nos ayude a conocer la realidad de su funcionamiento cognitivo y no a presuponer aspectos que pueden o que no pueden realizar... ".
Según Esteba-Castillo "el 40% de personas con discapacidad intelectual van a presentar problemas de salud mental; trastornos del estado de ánimo como depresiones, trastornos de ansiedad... por tanto en un momento u otro de su ciclo vital, la probabilidad de que aparezcan este tipo de problemas es alta".
Y este es precisamente el problema a la hora de hacer un diagnóstico correcto. "Generalmente hay un infradiagnóstico, lo que conocemos con el efecto "eclipse", es decir achacar toda afectación simplemente al hecho de tener discapacidad intelectual. El otro problema es el de creer que toda conducta puede ser explicable por un trastorno psicótico", afirmó Esteba-Castillo.